LA MUJER DESLEAL.

Una defensa a un partido Político y la gratitud

La Mujer por el afán de mostrarle al hombre su poderío utiliza su fuerza política  como arma en el recinto de un CONCEJO de la Ciudad y que su emancipación no es suficiente para traicionar; maquinan como en la época de Roma y su moral y concepto de familia se sacude, nos hacen creer que sus intenciones políticas alcanzan para salir avante con su  traición, mueven sus fichas y sin ningún recato y honestidad política cuidan sus intereses personales;  olvidando  el  alma  política de su partido y como las malas hijas decepcionan a su padres.

Como si estuviéramos en el arte escénico; exhiben su inmadurez política y su falta frente al Estado y las banderas de un partido.  Tendremos que recurrir a los estatutos por causa de su poca firmeza, conocedoras de las prohibiciones, no le podremos entregar la estola, tiremos una moneda al aire; esta que contiene la misma cara. Sus virtudes y dones no afloran y su conciencia de género de igual forma traicionan.

Les regalaremos un perfume refinado para ocasiones excepcionales; ya que con su actitud no dejan huella y unas gotas de memoria para que “su ejercicio sea franco, transparente y leal, de cara al pueblo y con el pueblo” como así lo infiere el preámbulo de su partido y así su discurso sea creíble en la esfera pública.

Por: Adriana Cardona López.