Por: Adriana M. Cardona López.
Una defensa de la contienda electoral feminista.
Dicen los que saben que el ego es un enemigo interior y que la contienda electoral en Colombia se ve amenazada por las mujeres; pero es inquietante tener que recurrir a las ciencias sociales para interpretar esos deseos; ya que no están pensando en darle un matiz de orden a Colombia para que la sociedad se sienta a gusto, tranquila y que lleguen tiempos de un poder legitimista.
Ellas se adulan entre sí y nos sacan a relucir su casta; algunas con sus ideologías e inclinaciones de aversión mandadas a recoger quieren revivir momentos subversivos heredados; otras no se
apoyan al interior de su partido, conociendo los estatutos y las obligaciones adquiridas y que en un acto de soberbia pasan por alto la normatividad que las rige. Y en el poder que desean ejercer
no se observa un objetivo humanista, con templanza y virtud. Y aprendiendo de los que más saben para su época, como lo fue el filósofo, historiador, psicólogo y sociólogo francés Michel Foucault,
podría esta sociedad concluir que el poder en este momento de la historia de Colombia no puede ser un "poder blando" y que, si ellas no se unen, llegarán al fracaso electoral.
La historia de Roma les dará las coordenadas para ganar la contienda electoral y así gobernar, ya que Calígula fue un ejemplo para aprender de las malas prácticas y que este gobierno hace lo
mismo; humilla el Congreso y doblega las Fuerzas Militares de Colombia y estos no se dan por enterados y que esa estrategia funciona para desestabilizar el Estado y toda una sociedad.
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